sábado, 25 de abril de 2015

Semana 4 Articulaciones (Clase del 25/04/2015)

Semana Nº 4
Articulaciones: Definición, desarrollo y clasificación. Mecánica articular. Movimientos activos y pasivos. Articulaciones de la cabeza: Temporomaxilar. Articulaciones del tronco: columna y pelvis. Articulaciones del miembro superior: Escápulohumeral, codo y muñeca. Articulaciones del miembro inferior: Coxofemoral, rodilla y tobillo.

Una articulación es la unión de dos elementos, en general nos referimos a la unión de elementos óseos. Se pueden clasificar las articulaciones según varios criterios, según su nivel de movilidad,
·                    Diartrosis: articulaciones muy móviles
·                    Anfiartrosis: articulaciones de movilidad limitada
·                    Sinartrosis: articulaciones inmóviles.
Según sus medios de unión, caracterización por la cual se establece el tipo de articulación,
·                    Sinovial: presenta líquido sinovial entre sus superficies articulares, una capsula que contiene al mismo y por dentro de esta, una membrana sinovial que secreta el liquido. En general, son todas articulaciones diartrosicas.
·                    Cartilaginosa: articulación establecida por cartílago hialino (costocondrales) o fibrocartílago (sínfisis y discos intervertebrales). Son articulaciones anfiartrosicas.
·                    Fibrosa: articulaciones establecidas por fibras de diferente tipo, ligamentarias en el caso de las sincondrosis (membrana interósea) u óseas en el caso de las suturas (cráneo). Son sinartosicas.
Según la correlación de las superficies articulares se pueden a su vez subclasificar, sobre todo las sinoviales son:
·                    Enartrosis o esferoideas: donde una superficie es convexa en forma de semiesfera y la otra cóncava dándole cavidad. Son articulaciones de amplia movilidad en todos los ejes.
·                    Condìleas: una superficie es convexa y de mayor longitud en un eje y la otra es levemente cóncava en correlacion. Son articulaciones que permiten el movimiento en los dos ejes, mayor y menor, de la convexidad.
·                    Troclear o bisagra: una superficie en forma de cilindro y otra que la recubre en un porcentaje de su cara externa. Permite movimientos uniaxiales a lo largo del perímetro del cilindro.
·                    Trocoide o pivote: Una superficie cilíndrica corta por dentro de otra en forma de anillo. Permite movimientos de rotación sobre el centro del anillo.
·                    Encaje reciproco o silla de montar: una superficie ovoidea y convexa en su eje mayor y cóncava en su eje menor, mientras que la que la enfrente es contraria, cóncava en su eje mayor y convexa en su eje menor. Permite movimientos en sus dos ejes.
·                    Artroidea o plana: ambas superficies son planas y trabajan por deslizamiento una sobre otra permitiendo movimientos biaxiales.
Estas articulaciones sinoviales se mueven por:
Movilidad pasiva, en la que una fuerza exógena al cuerpo utiliza las características de las mismas para establecer y evaluar su correspondiente movilidad.
Movilidad activa en la que la fuerza que establece el movimiento es endógena, dada por los músculos próximos a la misma.
En la cabeza contamos además de varias articulaciones fibrosas y sinartoideas, con la articulación temporomandibular, una sinovial doble bicondilea dado que la mandíbula presenta dos cóndilos que se articulan son sus correspondientes cavidades a nivel del hueso temporal pero las cuales presentan a su vez un cóndilo propio en su extremo anterior. Cada una de estas articulaciones presenta a su vez un menisco dentro de su capsula, el cual divide el liquido sinovial en dos cavidades y facilita la interacción por rolamiento de los dos cóndilos. Como medios de fijación, además de la capsula, cuenta con dos ligamentos inmediatos, uno medial y otro lateral y dos ligamentos más distantes, el esfenomandibular y el pterigomandibular. Esta articulación esta movilizada por los músculos de la masticación y suprahioideos, que le permiten su cierre/elevación y apertura/depresión, movimientos de protrusión y retracción y movimientos de lateralidad o de diducción.
A nivel del tronco contamos con: la columna, conformada por la articulación de las múltiples vertebras y la caja torácica.
Las vertebras se articulan de varias maneras entre sí. Presentan en su tercio anterior al cuerpo vertebral, el cual se va a articular con su inmediato superior e inferior mediante elementos fibrocartilaginosos que forman el disco intervertebral el cual cuenta con una porción externa fibrosa y anular y una interna pulposa y esferoidea, contenida por el anillo externo y las superficies articulares. En su tercio medio cuentan con las apófisis articulares con las que establece las articulaciones cigoapofisarias, sinoviales planas, dos por cada vertebra, una superior, con la apófisis articular interior de su vertebra superior y otra inferior con la apófisis articular superior de su vertebra inmediatamente inferior. Además forma otras articulaciones fibrosas del tipo sindesmosis a través de múltiples ligamentos longitudinales que unen todas las vértebras en un conjunto. Estos son los ligamentos, longitudinal anterior y posterior en relación a los cuerpos vertebrales, los ligamentos amarillos que unen las láminas por dentro del canal medular, los ligamentos interespinosos e intertransversos, que unen las apófisis homónimas y el ligamento espinoso que se fortifica a nivel cervical formando el ligamento nucal, el cual une el extremo de las apófisis espinosas entre sí.
Hoy que destacar la individualidad y diferenciación que tienen las primeras dos vértebras cervicales, estas conforman la articulación atlantoaxoidea que permite la amplitud de los movimientos de rotación de la nuca. Esto es gracias a sus superficies articulares, la apófisis odontoides por parte del axis (C2) y la carilla articular plana en el arco anterior del atlas (C1), la cual termina de rodear a la apófisis odointoides con un ligamento transverso por detrás del mismo, lo que cierra el anillo donde la apófisis odontoides pivoteará, cumpliendo su funcionalidad de articulación sinovial y trocoide. No hay que suponer que por esta particularidad, estas dos vértebras dejan de tener articulaciones cigoapofisarias como todas las otras o ligamentos largos en común, de hecho modifican las inserciones del ligamento longitudinal posterior, agregándole fibras y dándole las características que lo nombran ligamento cruciforme y agregan otros ligamentos como el transverso, ya mencionado y el suspensorio del axis. También hay que aclarar que la articulación que unen las apófisis articulares superiores del atlas con los cóndilos de la base del occipital, no son cigoapofisarias como todas sus inferiores, sino condileas, lo que colabora con la capacidad nucal para la movilidad.
A su vez, a nivel de las vértebras torácicas, contamos entre ellas con dos carillas articulares planas para cada costilla y otra, también plana a nivel de su apófisis transversa. Estas son todas articulaciones sinoviales planas por las que las costillas se fijan hacia posterior. Para cerrar la caja torácica, éstas se fijan a su vez al esternón por delante, sobre todo a través de articulaciones de tipo cartilaginosas, las sincontrosis esternocostales.
A nivel de miembro superior contamos con el complejo articular (conjunto de articulaciones) de la cintura escapular, el cual está compuesto por:
·                                           La articulación esterno-costo-clavicular, sinovial, en silla de montar que une a la clavícula con una fosa conjunta formada por el manubrio del esternón y la primera costilla. Esta es una articulación compleja dado que presenta un menisco articular que divide su capsula sinovial en dos cámaras y se encuentra reforzada por una capsula y cuatro ligamentos, anterior, superior, posterior e inferior.
·                                           La articulación acromio clavicular, sinovial plana que une el borde más medial del acromion de la escapula, con el borde más lateral de la clavícula. También se encuentra reforzada por una capsula y cuatro ligamentos, anterior, superior, posterior e inferior.
·                                           La articulación coracoclavicular, una sindesmosis establecida por los ligamentos conoideo y trapezoideo que unen a la apófisis coracoides de la escápula la cara inferior de la clavícula en su la unión de su tercio lateral con su tercio medio. Esta es de vital importancia para los movimientos basculantes que realiza la escápula.
·                                           La articulación escapulo-torácica, una sinsarcosis (unión de músculos) establecida sobre todo por el músculo serrato mayor, el cual se mueve entre el músculo subescapular en la cara anterior de la escápula y la cara posterolateral de la parrilla costal con sus músculos intercostales.
·                                           La articulación escapulo-humeral, sinovial esferoidea, establecida por la cabeza del humero y la cavidad glenoidea de la escápula, la cual se amplía mediante el rodete glenoideo, una formación fibrocartilaginosa para rodear por completo al tercio de espera que el húmero le aporta. Esta sinovial también se encuentra reforzada por una capsula y dos grandes ligamentos, uno anterior que cuenta con tres fascículos y otro posterior que solo cuenta con uno, por lo que es habitual que al luxarse (discontinuidad/alteración en la concordancia de las superficies articulares normales) esta articulación, lo haga hacia atrás.
Hacia distal, contamos con el complejo articular del codo el cual se encuentra formado por:
·                                           La articulación humero-cubital, sinovial y troclear que permite la flexo-extensión del complejo. Se establece por la cavidad sigmoidea mayor del cubito y la garganta de la tróclea humeral.
·                                           La articulación Humero-radial, sinovial, condílea que acompaña a los movimientos de las otras dos articulaciones del complejo. Se establece por el cóndilo humeral y la cúpula del radio.
·                                           La articulación radio-cubital proximal, sinovial y trocoide, permite los movimientos de porno-supinación del antebrazo. Se establece por la meseta de la cúpula radial y la cavidad sigmoidea menor del cubito. Cuenta con dos ligamentos que le son individuales, el anular que rodea a la meseta radial y el cuadrado que fija el borde inferior de la cavidad sigmoidea menor a la cara medial de la meseta radial.
Este complejo articular presenta una sinovial en común, delimitada y unida por una capsula. Además cuentan con ligamentos anteriores, posteriores, colaterales mediales y laterales.
Se continúa hacia distal, el complejo articular de la muñeca, en este se ven:
·                                           La articulación radio-cubital distal, sinovial y trocoide, permite los movimientos de porno-supinación del antebrazo. Te establece con una pequeña cavidad sigmoidea por parte del radio y la epífisis del cubito que rota en ella. Cuenta con un ligamento propio que es el triangular de la muñeca.
·                                           Primera linea articular del carpo, compuesta de lateral a medial por los huesos, escafoides, semilunar, piramidal y pisiforme, todos articulados entre si por sinoviales planas de baja movilidad. Y fijadas por ligamentos en los planos anteriores y posteriores.
·                                           Articulación radio-carpiana, sinovial y condílea, permite los movimientos de flexo-extensión y aducción-abducción de la muñeca. Se forma por la gran cavidad articular del radio, y el condilo formado por la primera línea articular del carpo. Esta cuenta con su capsula y ligamentos colaterales, anteriores y posteriores como medios de fijación.
·                                           La segunda línea articular del carpo, está compuesta de lateral a medial por los huesos, trapecio, trapezoide, grande y ganchoso, todos articulados entre si por sinoviales planas de baja movilidad. Y fijadas por ligamentos en los planos anteriores y posteriores.
·                                           La primera y segunda línea articular del carpo se articulan entre si estableciendo una sinovial y troclear de baja movilidad, gracias a las superficies que forman las diferentes articulaciones planas de cada línea, entre si. Esta colabora en los movimientos de flexo-extensión de la muñeca.
Las articulaciones propias de las manos son bastante similares para los 5 dedos, estableciéndose como:
·                                           Articulaciones carpo-metacarpianas, todas sinoviales y planas, a excepción de la del primer metacarpiano que es en silla de montar lo que le da una mayor movilidad y habilita su amplia oposición. Compuestas como lo dice su nombre, por la segunda linea articular del carpo y los 5 metacarpianos de la mano. Son de minima movilidad pero que permiten la leve aduccion-abducción de los dedos.
·                                           Articulaciones metacarpo-falangicas e interfalangicas, todas sinoviales y trocleares, permiten los movimientos de flexo-extensión que realizan los dedos. Como su nombre lo indica están establecidas entre los huesos metacarpianos con las falanges proximales o entre estas ultimas con sus sucesivas.
Para el miembro inferior y su cintura, contamos con la pelvis, cavidad anular ósea formada por el sacro, hueso que se vio en tronco dado que pertenece a la columna, y a los huesos sacros. Entre estos huesos contamos con las articulaciones:
·                                           Sacro-ilíaca, sinovial plana de baja movilidad que permite los movimientos de nutación y contranutación del sacro en relación al anillo sacro. Cuenta con una capsula propia y ligamentos anteriores, inferiores, posteriores que se extienden hasta la espina ciática, el lig. Sacro-espinoso, y hasta la tuberosidad isquiática, lig. Sacro-tuberoso y ligamentos superiores sumamente fuertes que nacen de las ultimas vértebras lumbares.
·                                           Sínfisis pubiana, articulación de tipo cartilaginosa  que articula por medio de fibras y cartílago a las porciones púbicas de cada uno de los huesos sacros entre si, cerrando el anillo. Es de muy baja movilidad como todas las articulaciones de este tipo.
El muslo, primera porción del miembro, se articula con la cintura a través de la articulación coxofemoral, sinovial y esferoidea, que habilita los movimientos multiaxiales de esta articulación. Se forma por los dos tercios de esfera aportados por la cabeza femoral y la cavidad acetabular de la cara lateral del hueso coxal. Cuenta con una capsula y varios ligamentos como medios de fijación, entre estos llama la atención el ligamento redondo que intracapsular, va desde el fondo de la cavidad acetabular hasta la fosita que le presenta el centro de la cabeza del fémur. Su utilidad como medio de unión es nula pero trae a través de la arteria del ligamento redondo, rama de la arteria obturatriz, un aporte nutricio. Luego se cuenta con tres ligamentos extracapsulares, uno anterior, el pubofemoral, otro superior y oblicuo de superior a inferior y de posterior hacia anterior, el iliofemoral, y otro posterior, el isquiofemoral, todos nacen a proximal en la periferia de los bordes de la cavidad acetabular y van a insertarse a distal a nivel del trocánter mayor del fémur.
En la epífisis distal del fémur se encuentra otra importante articulación, la rodilla, la cual es compleja debido a que presenta dos meniscos fibrocartilaginosos, sinovial y bicondilea. Está compuesta por los cóndilos del fémur a proximal, los platillos tibiales a distal, y la rótula hacia anterior. Posibilita los movimientos de flexo-extensión y una leve rotación. Como medios de unión presenta, la capsula, los ligamentos cruzados que son dos, intracapsulares y oblicuos, el anterior que va desde su fosita, por delante de la espina de la tibia hasta la cara medial del cóndilo lateral del fémur y el posterior d que va desde su fosita, por detrás de la espina de la tibia, hasta la cara lateral del cóndilo medial de la tibia y los ligamentos extracapsulares, el anterior, dependencia del musculo cuádriceps que tras insertarse en el borde superior de la rotula, se expande hasta el tubérculo de la tibia como ligamento rotuliano, y hacia las caras externas de los cóndilos del fémur como ligamentos alares, los posteriores, arqueado y oblicuo, dependiendo del músculo poplíteo y semimembranoso respectivamente y los colaterales, el medial, tibial, en forma de cinta y adherido a la cápsula y el lateral, peròneo, en forma de cordón y que se despega de la articulación para llegar hasta la cabeza del peroné, que no conforma parte de este complejo articular.
Esta articulación presenta frecuentes patologías kinesio-traumatologicas, debido a que por su uso, los ligamentos cruzados, sobre todo el anterior, suelen distenderse o romperse. En estos casos, sobre todo cuando una solución quirúrgica no es conveniente, se aprovechan los ligamentos activos de la articulación, estos son aquellos que son expansiones de tendones. Se ejercitan los grupos musculares correspondientes a estos tendones y se intenta de suplantar la estabilidad perdida.  Otros elementos problemáticos de esta articulación, son los meniscos, que coaptan las superficies articulares y acompañan en los movimientos de las mismas, pero en muchos casos y por causas diversas, se pueden ver compresos por ambas superficies y rotos por esta presión. A este problema se le suma el hecho que están escasamente vascularizados sobre todo por su borde interno, dato importante para evaluar la posible recuperación de la lesión previamente mencionada, dado que para tal recuperación, una rica vascularización es imprescindible. Es por esto que, a diferencia de la ruptura de los ligamentos cruzados, la ruptura de los meniscos conlleva, en la mayoría de los casos, una intervención quirúrgica.
El peroné se articula con la tibia en tres regiones, pero solo la proximal es sinovial y plana, el resto es una sindesmosis formada sobre todo por la membrana interósea.
El tobillo, presenta la articulación tibioastragalina, sinovial y troclear, esta formada por la mortaja tibioperónea que envuelve la garganta del astrágalo, hueso que se caracteriza por carecer de inserciones tendinosas por lo que se deduce la carencia de medios unión activos directos en esta articulación y posibilita luxaciones particularmente increíbles. Presenta como medios de unión, una capsula y ligamentos multifasciculares, anteriores y posteriores débiles debido a los tendones que los complementan corriendo paralelos a sus ejes longitudinales a pesar de que no se inserten directamente en ambos elementos de la articulación. Y los ligamentos colaterales, ambos sumamente resistentes y cortos, en particular el medial.
Distal al tobillo se articulan los huesos del tarso, con las articulaciones:
·                                           Astrágalo-calcánea: sinovial y plana doble, alrededor del seno del tarso, eje que le permite una cierta capacidad de rotación para los movimientos de inversión y eversión.
·                                           Astrágalo-navicular y calcáneo-cuboidea que conforman una línea articular similar a la primera línea del carpo. Siendo ambas sinoviales y planas.
 Este complejo articular, se fija por medio de ligamentos individuales por delante, detrás y los laterales de cada una de las superficies, pero sobre todo por los ligamentos colaterales de la articulación tibio-astragalina.
Por delante, se presentan las tres cuñas, que conforman la última línea articular que se va a cerrar por el lateral con el hueso cuboides y hacia posterior con el navicular. Al igual que las otras articulaciones, todas las superficies son sinoviales planas fijadas por una capsula y ligamentos individuales.
Los movimientos de estas articulaciones planas en individual con mínimos, pero en conjunto acompañan al pie en todos sus movimientos, tomando particular importancia en los de inversión y eversión.

Finalmente y similar a los huesos de las manos tenemos las articulaciones tarso-metatarsianas, planas, las metatarso-falángicas condileas y las interfalangicas, trocleares.

viernes, 17 de abril de 2015

Huesos del esqueleto apendicular







Clase del 18/04/2015 Semana 3



Semana Nº 3
Huesos del miembro superior: Cintura Escapular, brazo, antebrazo y mano. Huesos del miembro inferior: Cintura pelviana, muslo, pierna y píe.

El cuerpo humano cuenta con cuatro apéndices conocidos como miembros, dos superiores y dos inferiores, los cuales se articulan con el tronco a través de las cinturas, escapulares para los miembros superiores y pelvianas para los miembros inferiores.
MIEMBRO SUPERIOR
La cintura escapular está compuesta por los huesos:
·                    Escápula: hueso plano y triangular con base superior y vértice inferomedial, se ubica en el dorso y cuenta con una espina en su cara posterior que divide sus dos fosas supra e infraespinosa y termina en su extremo lateral con el acromion, apófisis palpable con la que se articula con la clavícula. En su cara anterior cuenta con la fosa subescapular y otra pequeña apófisis denominada coracoides, próxima a su ángulo superoexterno. Y en la porción superior de su borde lateral cuenta con la cavidad glenoidea, por la que se articulará con el hueso humero y dos tubérculos, supra e infraglenoideo.
·                    Clavícula: hueso alargado de forma s itálica de convexidad medial y concavidad lateral que cuenta con un extremo aplanado y lateral por el que se articula con el acromion de la escápula y otro extremo de forma poligonal y medial con el que se articula con el esternón y la primera costilla. En su cara superior cuenta con la rugosidad deltoidea y en su cara inferior con la escotadura del musculo subclavio, el foramen de la arteria nutricia y el tubérculo de inserción de los ligamentos conoides y trapezoide por lo que se articulará con la apófisis coracoides de la escápula.
A su vez el miembro superior está compuesto por los huesos:
·                    Húmero: hueso largo del brazo que cuenta con una epífisis superior con una glena en forma de tercio de esfera por la que se articulará con su cavidad correspondiente en la escápula y dos apófisis en su cara anterior, el troquin, pequeño y medial y el troquiter, más grande y lateral. Entre estos dos discurre un surco denominado bicipital debido a que contiene al tendón largo del musculo bíceps. Esta epífisis cuenta con dos cuellos, uno anatómico, en donde la glena se une al resto de la epífisis y otro quirúrgico a nivel metafisario, donde la epífisis se une a la diáfisis. Este último recibe su nombre debido a su frecuente fractura y consecuente necesidad de intervención quirúrgica. A nivel diafisario encontramos el surco de torsión, que se relacionará con la arteria humeral profunda y el nervio radial. Y finalmente en su epífisis inferior cuenta con dos apófisis en sus laterales, la epitróclea hacia medial y el epicondilo hacia lateral, dos cavidades, una anterior denominada sigmoidea y otra posterior de mayor tamaño y denominada olecraneana, y sus dos superficies articulares, el domo o cóndilo de la cúpula radial hacia lateral y la tróclea para la cavidad cubital hacia medial.
·                    Radio: hueso largo y lateral del antebrazo que cuenta con una cúpula en su epífisis superior por la que se articulará con el humero por su extremo, y con la cavidad sigmoidea menor del cubito por su borde. Tiene el tubérculo bicipital a nivel de su metáfisis, donde se inserta el musculo bíceps. Un borde filoso medial en su diáfisis por el que se unirá al cúbito a través de la membrana interósea y una gran epífisis distal, de forma cuadrangular y con dos cavidades articulares, una inferior, radiocarpiana y otra medial, radiocubital. Esta epífisis presenta a su vez en su borde lateral la apófisis estiloides del radio y en su cara posterior varios surcos correspondientes al paso de los tendones de los músculos flexores desde el compartimiento antebraquial posterior al dorso de la mano.
·                    Cúbito: hueso largo y medial del antebrazo que cuenta con una epífisis proximal compleja con una cavidad sigmoidea mayor con la que se articulará con la tróclea del húmero, delimitada por las apófisis sigmoides hacia anterior y olecraniana hacia posterior y otra cavidad sigmoidea menor en su cara lateral con la que se articulará con el borde de la cúpula radial. En su diáfisis cuenta con un borde lateral filoso paralelo al radial y de igual función articular y en su epífisis distal cuenta con una pequeña superficie articular circular que aportará a la unión radiocubital distal y su apófisis estiloides.
·                    Del carpo: conjunto de huesos cortos que componen la muñeca. Se articulan en dos líneas, y estas a su vez con el radio hacia proximal y con los huesos metacarpianos hacia distal. La primera línea está compuesta, de lateral a medial, por los huesos: escafoides, semilunar, piramidal y pisiforme. La segunda, también de lateral a medial, por: trapecio, trapezoide, grande y ganchoso.
·                    De la mano: La mano está compuesta por los huesos metacarpianos, 5 huesos largos que se enumeran de lateral a medial para su identificación particular y que componen la palma, y las falanges que componen los dedos, tres en los dedos 2ª-5ª, individualizables como falange proximal, media y distal y dos en el caso del primer dedo, individualizables como falange proximal y distal.

 MIEMBRO INFERIOR
La cintura pelviana está compuesta por el coxal, hueso plano compuesto por tres focos embrionarios denominados, iliaco el superior, pubis el anteroinferior, e isquion el posteroinferior. Estos tres se fusionan en la cara lateral del hueso, formando la cavidad acetabular por la cual el mismo se articula con el fémur. A su vez el ilion, presenta una superficie articular aplanada el su cara medial, por la cual el coxal se articula con el hueso sacro del tronco, y el pubis lo imita con su cara para la sínfisis con la que se articulara con el pubis contralateral cerrando el anillo pelviano. Otros hitos morfológicos de este hueso son, en el ilion, la cresta iliaca en su borde superior y la espina iliaca hacia posterior, la cual limita las escotaduras ciáticas, mayor hacia superior y menor hacia inferior. El isquion presenta su tuberosidad en su punto más posterior, importante debido a sus inserciones y función de apoyo en la posición de sentado. Y por último, entre las ramas isquio e iliopubicas, se encuentra el foramen obturatriz.
El miembro inferior imita la morfología del miembro superior en varios aspectos y está compuesto por los huesos:
·                    Fémur: hueso largo del muslo, con una epífisis proximal similar a la del húmero, que cuenta con una cabeza articular con dos tercios de espera para la articulación coxofemoral, un cuello anatómico por el que se une la cabeza al cuerpo, dos trocánteres a nivel metafisario, uno mayor, externo y otro menor, interno. Un cuello quirúrgico por debajo de los trocánteres y una larga diáfisis de filo áspero posterior en forma de Y invertida, para las inserciones musculares. En su epífisis distal cuenta con dos grandes cóndilos, separados por la escotadura intercondilea que se amplía de anterior a posterior.
·                    Rótula: hueso sesamoideo de la rodilla, dependiente del tendón cuadricipital, triangular de vértice inferior y base superior, con una cara convexa y palpable anterior y otra levemente cóncava y articular hacia posterior.
·                    Tibia: principal hueso largo de la pantorrilla, con una epífisis proximal con dos platillos tibiales separados por una espina central, por los que se articula con los cóndilos del fémur hacia superior, una escotadura en cara lateral por la que se articula con la cabeza del peroné y un tubérculo en su porción anterior, palpable para la inserción del ligamento rotuliano. Cuanta con una densa diáfisis de tres filos, uno anterior, palpable en superficie, uno medial por el que se articula mediante la membrana interósea con la diáfisis del peroné, inmediatamente lateral a si, y otra posterolateral que divide compartimientos musculares. Finalmente a nivel de su epífisis distal cuenta con una gran garganta articular en su cara inferior, una escotadura en su cara lateral para la articulación tibioperonea distal, y su apófisis estiloides en su cara lateral.
·                    Peroné: hueso largo y lateral de la pantorrilla, que cuenta con una epífisis proximal dilatada, su cabeza, por la que se articula con la meseta tibial, un cuello adelgazado con el que se relaciona el nervio peroneo común, y una diáfisis con un filo medial por el que se une a la membrana interósea. Finaliza en una epífisis distal más aguda que la proximal y que cuenta con un surco para el paso de los tendones extrínsecos del pie.
·                    Del Tarso: conjunto de huesos cortos que componen tobillo y pie. Se articulan en tres líneas, y estas a su vez con la mortaja tibeoperonea  hacia proximal y con los huesos metatarsianos hacia distal. La primera línea está compuesta por el astrágalo hacia superior y articulando con la mortaja tibeoperonea y con el calcáneo hacia inferoposterior como talón, uno de los principales puntos de apoyo. La siguiente línea está conformada por los huesos, navicular, por delante del astrágalo y cuboides por delante del calcáneo. La última línea articular se ubica medial a la porción distal del cuboides y anterior al navicular, y está compuesta por las tres cuñas que se individualizan de forma numérica de medial a lateral.
·                    Del resto del pie: está compuesto por los huesos metatarsianos, 5 huesos largos que se enumeran de medial a lateral para su identificación particular y las falanges que componen los dedos, tres en los dedos 2ª-5ª, individualizables como falange proximal, media y distal y dos en el caso del primer dedo, individualizables como falange proximal y distal.

sábado, 11 de abril de 2015

Esqueleto axial (vértebras)

Huesos del cráneo

Clasificación de los huesos






Clase del 11/04/2015 - Semana 2



Semana Nº 2
Huesos: Concepto de osificación y desarrollo. Clasificación. Huesos del cráneo y Base de cráneo. Huesos de la Cara. Huesos del esqueleto axial: vértebras, costillas, esternón

Los 206 huesos del cuerpo humano se originan a nivel embrionario desde tejido mesenquimático, como el cartílago, ricamente vascularizado el cual diferencia sus células para la osificación de sí mismo. Este tejido se organiza en centros de osificación. Los cuales por su calcificación fijan las características propias de los huesos, como la dureza. Pero un hueso suele tener más de un punto de osificación, lo que le permite que en los puntos donde estos se contactan persista durante la niñez, adolescencia y adultez temprana, el cartílago de crecimiento. Es esta región flexible, ricamente vascularizada y en constante replicaron y diferenciación la que posibilita el crecimiento. Una vez finalizado el crecimiento normal, la osificación del hueso no permanece constante, es un proceso en permanente progreso y regreso que permite entre otras cosas, regular la calcemia y posibilitar la precomposición de fracturas.

Los huesos se clasifican en tres granes grupos con características morfológicas y funcionales comunes:
·                   Los huesos largos: prima el largo por sobre las otras dimensiones y son característicos de los miembros. Su morfología les posibilita cumplir su función de palanca y administrar fuerza a los movimientos. Ejemplos son: fémur y humero.
·                   Los huesos planos: priman dos dimensiones sobre una tercera. Cumplen función de protección. Ejemplos son: escápula y H. parietal.
·                   Los huesos cortos: son equiláteros en sus tres dimensiones lo que les otorga una forma cuboide de gran densidad central que les posibilita soportar peso. Ejemplos son: H. Grande y Calcáneo.
Los huesos del cráneo son:
·                   Los pares:
o        Huesos temporales: Contienen la caja timpánica (oído medio), al oído interno y está en inmediata relación con la arteria carótida y la vena yugular.
o        Huesos parietales: delgados y por encima de los huesos temporales se relacionan inmediatamente con las arterias meníngeas y los senos venosos hacia su cara interior.
·                   Los impares, de posteroinferior a anterosuperior:
o        Hueso Occipital: el más posterior se relaciona con el cerebelo hacia interior y con la columna vertebral y la medula hacia su cara inferior, a través del foramen magno que permite la continuación del encéfalo con la medula espinal. Al igual que el hueso temporal esta en inmediato contacto con el origen de la vena yugular.
o        Hueso esfenoides: hueso central y complejo entre cráneo y cara, cuenta con una cavidad neumática propia y múltiples escotaduras y forámenes que permitirán la comunicación del cráneo con la cara, como por ejemplo la fisura orbitaria superior (hendidura esfenoidal) que permitirá la comunicación del cráneo con la órbita y el paso de los elementos nobles que se asocian al ojo como la arteria oftálmica y los pares craneales III, IV y VI. A su vez en su cara interior se relaciona con inmediatez con la arteria carótida interna en su porción intracraneal y con la glándula hipófisis.
o        Hueso etmoides: en inmediata relación hacia inferior con las cavidades nasales y las celdillas homónimas, permite el paso de los filetes olfatorios del primer par craneal.
o        Hueso frontal: ancho en su base, con su cavidad neumática homónima y los rebordes orbitarios superiores, y delgado en su porción superior conforma la frente.
La base del cráneo, conformada por los huesos occipital, temporales y esfenoides, es de especial importancia y complejidad debido a sus comunicaciones con el cuello y asociación a estructuras vitales.
Los huesos de la cara son:
·                   Pares:
o        Malares: protruyen y son palpables en los pómulos y conforman parte del arco cigomático y el ángulo inferolateral de la orbita correspondiente.
o        Maxilares: poseen su propia cavidad neumática y conforman el piso de la órbita, parte del techo de la boca, con el arco dentario superior y parte de la pared lateral de las fosas nasales.
o        Lacrimales: pequeños, conforman pate del ángulo inferomedial de la órbita y allí el conducto lacrimonasal que como su nombre lo indica comunica la órbita con las fosas nasales.
o        Palatinos: conforman la porción más posterior del las fosas nasales (coanas), la porción posterior del techo de la boca y una pequeña parte del fondo de la órbita.
o        Cornete inferior: Pequeña y curvada, se encuentra dentro de la cavidad nasal.
·                   Impares:
o        Vómer: fina lámina vertical conforma la pared medial de ambas cavidades nasales.
o         Mandíbula: conforma el arco dentario inferior y las ramas que articulan el mismo al hueso temporal.
El esqueleto axial está compuesto por:
Vértebras: 7 cervicales, 12 torácicas, 5 lumbares, 5 sacras fusionadas que componen el hueso sacro y 4 o 5 atróficas que forman el coxis. Estas se caracterizan por tener en común: Un cuerpo, grande y cuadrangular hacia anterior, dos pedículos que unen el cuerpo a las apófisis articulares, dos apófisis articulares a cada lado con sus respectivas superficies articulares y apófisis transversas, dos laminas que unen las apófisis articulares a la apófisis espinosa y una apófisis espinosa hacia posterior.  Excepto las últimas coccígeas, todas cuentan con un canal medular conformado por un arco posterior compuesto por las láminas y un arco anterior compuesto por pos pedículos y la cara posterior del cuerpo vertebral.
Las características que individualizan a las vértebras en cada uno de los segmentos son:
§     El atlas: primera vértebra cervical, se caracteriza por carecer de cuerpo vertebral por lo que está formada únicamente por un arco posterior con una muy pequeña apófisis espinosa y un arco anterior con los forámenes vertebrales y la carilla articular para el diente del axis. En la unión entre estos dos arcos tenemos el cuerpo articular, cóncavo y aplanado.
§     Axis: segunda vértebra cervical, se caracteriza por presentar en su cuerpo vertebral una apófisis vertical denominada axis la cual se articulara con C1 permitiendo los movimientos de rotación nucal.
§     V. Cervicales: A excepción de la séptima, todas cuentan con fórrameles vertebrales a cada lado de su cuerpo, incluyendo a la séptima pero exceptuando a las dos primeras, cuentan con carillas articulares uncinadas en su cuerpo y cigoapofisarias que se orientan oblicuamente hacia anterosuperior  y posteroinferior en sus cuerpos articulares y apófisis espinosas bífidas.
§     V. Torácicas: Se caracterizan por presentar dos carillas articulares en los bordes supero e infero laterales de sus cuerpos y una tercera a nivel de la apófisis transversa para las costillas. A excepción de la doceava que solo presenta una carilla articular en sus bordes superolarelaes. Tienen una apófisis espinosa oblicua y descendente y las carillas articulares cigoapofisarias que miran hacia posterior la superior y hacia anterior la inferior.
§     V. Lumbares: se caracterizan por su gran tamaño y su apófisis espinosa cuadrangular y horizontal. Cuentan con carillas articulares cigoapofisarias que miran hacia medial y posterior, las superiores, y hacia lateral y anterior, las inferiores.
Costillas: doce, pares y curvas, se las considera huesos alargados y planos dado que cumplen función de protección pero también de palanca en la mecánica respiratoria. Se articulan hacia posterior con las vértebras y hacia anterior con el esternón a través de cartílago o permanecen flotantes (las últimas dos).
Esternón: hueso plano que cuenta con un manubrio, poligonal hacia superior, un cuerpo rectangular en su parte media y una apófisis xifoidea en su parte inferior. Se ubica en la línea media y en la parte anterior del tórax y cumple función de protección. Cuenta con medula ósea activa incluso en la vida adulta por lo que es un sitio para la toma de la misma.